Homenaje a dos escuelas secundarias paralelas en su perfección en Lanús Este
Colegio Nacional Luis Piedrabuena
Escuela Industrial J.F. Kennedy
Almas y voces juntas,
manos entrelazadas,
honda fe de argentinos
y un mismo afán.
Ansias de noble ciencia
nunca saciadas, ojos puestos en rutas
en rutas del más allá.
y echen a vuelo el nombre de estudiantes
en versos de romántica canción
los que lo son, los que lo fueron antes,
los que por siempre tienen de estudiantes
para toda la vida el corazón.
4° y 2o verso de la Canción del Estudiante.
Viajamos en el tiempo mediados del Siglo XX, cuando los contenidos de la enseñanza iban a la par con la educación. Contenidos que dejaron de estar a la altura, casi sin darse cuenta, y la enseñanza fue cambiando, cambiando de nombres con los resultados a la vista.
Hoy rindo homenaje a dos escuelas que fueron motivo de orgullo para Lanús, dado que a ellas deseaban ingresar alumnos de Lomas de Zamora, Adrogué, Temperley, pero solamente lo conseguían los que obtenían mayor puntaje en el examen de ingreso que se tomaba a principios de diciembre.
Comenzaré con la Escuela Nacional Luis Piedrabuena (de turno tarde y vespertina), les cuento: Cuando entré a la escuela N° 18 en marzo de 1960, supe que debía compartir la planta baja con otra Escuela Nacional Secundaria. La planta baja, estaba ocupada por la Primaria de la Escuela 18, (con distintos horarios de entrada y salida) en Madariaga 1960, además contaba con tres salones en un piso superior para 4°, 5° y 6° grado, con un patio y baños para el Nacional, abajo, toda la Primaria.
Fueron muchos los años que compartimos así. Yo ocupaba el primer salón subiendo la escalera. Comencé con un 4° grado, luego un 6° y un 7° (cuando cambió). ¡Qué felicidad! ¡Qué ejemplo! Todos los alumnos eran educados, respetuosos, silenciosos a la hora de izar o arriar la Bandera, tarea que era realizada por las dos escuelas, a la entrada y a la salida. ¿Qué pasó?
¿Dónde quedó aquella época en la que todos los niños eran educados, bien enseñados en sus casas, cuando se hacía «sólo lo que era debido»? En aquellos días, los maestros y profesores eran quienes tenían la razón, y funcionaba muy bien el sistema de amonestaciones. Era vergonzoso ser descortés con los superiores o responder de mal modo. Lamentablemente, todo ha cambiado así como cambian los tiempos. Hoy, hasta parece que se ríen de los profesores, y se instala la sensación de que existe una asignatura pendiente: la educación.
El Sr. Noceche estaba por la tarde como Vice-Director: era admirable ver como, con su sola presencia, imponía ese silencio que sólo propicia el respeto. En el turno de la tarde, la Vice-Directora de la Primaria era la Srta. Lina Galli, y en la dirección del turno mañana, se desempeñaba la Sra. Zahira González de Rocco.
Aún me parece ver cuando, cada día, antes de pasar a las aulas, se brindaba el cordial saludo a los profesores: la Dra. Turón, La profesora Srta. Zafira Monteagudo, la profesora de francés Srta. Elvira Jiménez (quien luego fuera profesora particular de mi hijo Juan Carlos), la profesora de castellano Sra. Celia Alcaide, la profesora Sra. Gaebeler y otras, cuyos nombres se pierden en la bruma del tiempo.
Mi compañera fue la Sra. Alcaide. Ella fue quien me enseñó la Gramática Estructural, dado que, según ella, mis alumnos que ingresaban a Primer año la conocían, y se encantaban cuando les explicaba algo nuevo… ya lo sabían.
Los objetivos diarios se cumplían hora a hora, no se perdía el tiempo, y eso, se vio reflejado en los resultados: los alumnos comprendían que cada día se llevaban algo nuevo, y que necesitaban saber y comprender en su camino al crecimiento… entonces lo aprovechaban todo. Era tan lindo tener un grupo interesado por las clases que los estaban preparando para llegar a la Escuela Secundaria… y luego, con el paso del tiempo, se los extrañó cuando tuvieron que partir a su nueva Escuela, bien merecida, la cual, cumplió 50 años en abril del 2003, en la calle Gral. Arias 1935.
Allí comenzó la Sra. Cazmus como Directora, la seguía la Srta. Adela Barbieri, gran Directora, una mujer que se preocupó por todo, y eso se reflejaba en el respeto de los alumnos con ella al frente de la Escuela, era una simple persona de estatura regular, que se transformaba en un gigante, muy apreciada por todos, creo hoy que la Sra. de Rodríguez Flores, que es quien está ocupando ese puesto, seguramente tratará, aunque sin dudas con bastante dificultad, de que quede algo de lo mucho que les cuento, a pesar de que tantos cambios, seguramente habrán restado algo de aquello que alguna vez sobró: Educación.
Hoy, esa escuela pasó a llamarse: «Escuela Media N° 8 Tte. Gral. De Marina Luis Piedrabuena».
Pasemos a recordar a la otra Escuela Secundaria, la Industrial E.N.E.T N° 1 de Lanús John Fitzgerald Kennedy.
Nació en 1943 y cumplió 50 años en 1993, así que tiene 63 años. Es un edificio siempre cuidado y pintado.
Ocurrió que Lanús crecía en fábricas e industria, y no había jóvenes que supieran un oficio. Dependían de los adultos que les enseñaran a usar un torno o una fresadora. Se necesitaban torneros, matriceros, es decir: jóvenes que pudieran desempeñarse en distintos oficios, y se pensó en que en una escuela se ofreciera todo eso. Y así, en la calle Basavilbaso 2073 Lanús Este, fue conocida como Escuela vieja, y era la Escuela Técnica de Oficios de la Nación.
Antes de este «ahora», esta escuela vivió grandes dificultades, como por ejemplo, tener 70 vacantes y 150 inscriptos y recibió de muchos benefactores, entre ellos el Centro Comercial de Lanús, prestigiosa entidad de la zona que siempre tendió su mano para el progreso de Lanús. Antes allí funcionó la Escuela N° 71 facilitada por la Dirección Gral. de Escuelas de la Provincia de Buenos Aires. Sus fundadores fueron 70 alumnos, y no tenían taller, pero el Director conseguía todo lo necesario para poder trabajar. Con el paso de los años, la Escuela cumplió con su gran misión.
En abril de 1943, mediante decreto N°148065 se crearon varias escuelas de Artes y Oficios, entre ellas, la querida Kennedy. Allí, se formaron y prepararon obreros calificados en diferentes actividades industriales. La Escuela adoptó la especialidad «Mecánica», y estaba habilitada en los oficios de: Tornero, fresador, matricero, ajustador, fundidor y modelista. Se otorgaba el título de Experto Mecánico con 3° año aprobado, y el de Experto Calificado, con 4° año aprobado.
Fue la Escuela de nivel secundario de Lanús en el orden nacional. Con el tiempo se transformó en un Centro Educativo de sólido prestigio en la zona. Fue una Escuela que contó con el cariño de todos. Sólo así pueden hacerse grandes cosas.
El Kennedy, nació de pronto y de la nada, con el esfuerzo mancomunado de vecinos, Directores, profesores y alumnos. Llegó a tener el magnífico edificio de la calle Arias, cedido por una Cooperativa de Producción, que logró que en Octubre de 1959 le fueran adjudicados los terrenos con frente a la calle Arias y limitando por las prolongaciones de las calles Córdoba y Gaebeler con un fondo de 112 mts.
La Cooperativa se comprometía a entregar el edificio en un plazo máximo de 10 años. La dirección técnica estuvo a cargo del ex-profesor Juan Carlos Casanova. La piedra fundamental fue colocada el 20 de octubre de 1963, el día en que Lanús cumplía 75 años.
Todos colaboraron: comercios, industrias, los alumnos se encargaban de las rifas y los bonos contribución. Con lo recaudado, se construyó la estructura del sector «aulas».
La Escuela lleva el nombre John F. Kennedy como homenaje al estadista asesinado en 1963. Este acto se llevó a cabo el 4 de julio de 1964.
Cuando se llevó a cabo la mudanza todos los alumnos colaboraron incansablemente, todo fue hecho a puro corazón.
La ENET N° 1 de Lanús era muy importante. En 1982 se anexó el campo de deportes de 10.600 m2.
Felicitamos a los profesores, profesorazos, al alumnado y a sus directivos, que merecen ser recordados, porque cada uno de ellos hizo grande a la Escuela Kennedy:
Directores
Lázaro Honorio
Vázquez Mario Manuel
Pavón Francisco
Vitola Carlos Alfredo
Lettieri Luis
Salcedo Jorge Noé
Frattini Mario Hugo
Vice-directores
Vázquez Mario Manuel
Pascual Víctor
Vitola Carlos Alfredo
Salcedo Jorge Noé
Di Lelia Sara Lía
Beaufilis Héctor Alberto
Frattini Mario Hugo
Capón Ángel Albino
Otero Osvaldo Emilio
Secretarios
Vitola Carlos Alfredo
Florez Luis Hugo
Nardelli Hugo Juan
Carballo de Smith Isabel
Gracias a todos los que colaboraron para que hoy en el recuerdo, éstas queden como las dos mejores Escuelas Secundarias de Lanús: El nacional N° 1 Tte. Cnel. Luis Piedrabuena, y la Industrial John Fitzgerald Kennedy. Hoy son la Escuela de Educación Media N° 8 Luis Piedrabuena, y Técnica N° 5 Lanús JFK. A pesar de tanto cambio de título, seguirán siendo el orgullo de Lanús.
Eran secundarias de 5 años la primera, y 6 años la segunda. Era admirable comprobar los conocimientos de esos alumnos y lo bien preparados que estaban para entrar a la Facultad.
Como resultado de dos secundarias bien planificadas, tenemos: grandes técnicos, excelentes médicos, investigadores de vanguardia, respetados a nivel mundial por el trabajo que realizan.
Al finalizar la secundaria, se presentaban al examen de ingreso de las distintas Facultades, obteniendo muy buenas notas. Ahora, hay casos en que no hay alumnos aprobados en su examen de ingreso, como en la Universidad nacional de La Plata, según he leído.
Humildemente, creo que en cada año, desde la escuela primaria, deberían aprobarse los contenidos, para que los alumnos puedan contar con una base sólida y segura, tanto informativa como formativa.
¡Cómo no realizar el homenaje de estas páginas a estas dos queridas escuelas de Lanús Este, y felicitar a los profesores, profesorazos, y al gran alumnado: estudioso, cumplidor y respetuoso!.
Hoy todos pueden decir: «Fuimos lo mejor del Siglo XX, así se estudiaba a mitad del siglo pasado»… Se quedó pensando, no?
Jun/Jul 2006 Revista Emersur
